¿Es tarde para hacer una lista de propósitos para el año nuevo? Hombre, si alargo el plazo hasta mediados de enero del año que viene... cumplo el tiempo y saco cuentas entonces, ¿no? Es que hasta ahora no he tenido ni tiempo ni ganas de ponerme a pensar en estos temas que, hay que reconocerlo, en el fondo no son más que un compendio de buenas intenciones típicas y tópicas. Ni siquiera sé por qué me molesto en escribirlos... siempre son los mismos. Como no los cumplo no me queda más remedio que volver a intentarlo. Al menos este año puedo borrar de la lista eso de dejar de fumar. Eh, he cumplido con uno!!! Venga, acabemos con el rollo! Como las tiritas, que duelen menos si las arrancas de golpe... o eso dicen!
- Perder los kilos que me sobran, esta vez de verdad. Tampoco son tantos pero como dice muy madre, que sabe mucho aunque me cueste darle la razón, más vale que le ponga freno al grito de ¡YA!
- Y qué mejor remedio para cumplir con lo primero que apuntarse a un gimnasio... y si encima vas, buenooooo!!! Eso sí que va a ser la leche! A ver, ya estoy apuntada pero está tan lejos del trabajo que cuando llego prácticamente sólo tengo tiempo de: desmaquillarme, ponerme las mallas y la camiseta, bajar a la sala de máquinas, echarle un vistazo al cachitas de turno, ducharme y subir hasta la tienda a toda pastilla comiendo por el camino. Así que he visto un sitio en la calle Aragó que si de verdad cuesta lo que pone en el cartel... pues es un chollo. Total, estoy pagando un poco menos al mes por no perder el dinero de la matrícula y no voy, qué puedo perder?
- Mejorar el inglés, como sea: leyendo más libros intentando utilizar el diccionario lo menos posible, escuchando más música poniendo atención a lo que dicen y, sobre todo, viendo más pelis y series en VOSE, que es un método que parece que funciona. Con lo rarito que habla Nicky y los últimos videos que han colgado en la web de motogp ¡los he entendido casi del todo! Y además me estoy planteando muy seriamente apuntarme el próximo trimestre en la UOC con Inglés I... Dije que cuando acabara con "Historia de Catalunya II" dejaría una temporada el tema de estudiar pero me imagino que inglés será un poco menos pesado que la historia, con tantas fechas y tantos datos, y ya tengo una base que me puede ayudar. Y económicamente tampoco sería un gran sacrificio, cuesta la mitad de lo que pagué por Historia... No sé, hay que pensarlo seriamente.
- Quiero disfrutar más de mi tiempo libre, aunque sea poco. Ver más a mis amigos, a mi familia, ver más películas de estreno, ir más al teatro, ver más exposiciones, leer más, salir a bailar y a conciertos, reírme tanto como pueda y llorar, en la medida de lo posible, sólo cuando una obra, un libro o una película me toquen la fibra, como el sábado por la noche cuando acabó "Salvador", que me dejó desconsolada como pocas veces me había pasado. Sentirme más viva de lo que me he sentido durante demasiado tiempo en el último año, en definitiva. Hacer más locuras, pensar menos y actuar más, enamorarme... y desenamorarme sin dejarme la piel, si es necesario. Encontrarme, sentirme, admitirme como soy, a solas o en compañía. Ser yo.
- Cuando llegue el verano, o al menos cuando ya se deje sentir, estaría de maravilla poder ir a la playa más de una vez, que es lo máximo que he conseguido en los dos últimos años. Yo no me pongo morena ni por misericordia; paso por todas las variedades del rojo, luego me pelo como las serpientes y vuelvo a empezar el ciclo. Cambio de piel varias veces cada verano! Después me salen unos dos millones de pecas más que se suman a las que ya tengo. Si sigo así, dentro de poco no tendré que preocuparme por el color de mi piel: dejaré de estar paliducha de una manera natural. Pero es igual, lo que quiero decir es que sienta bien estar al aire y al sol, con precauciones, un ratito. Además, me encanta pasear por la orilla... y torturar a mi hermana si ha venido porque ella prefiere no moverse y yo la obligo a acompañarme, jejeje.
- No perderme NI UNA CARRERA DEL MUNDIAL! El año pasado, por una cosa o por otra, al final acabé por no ver algunas y eso me revienta. Además, si las cosas me funcionan, iré a ver mi primera carrera en el extranjero: el G.P. de Inglaterra. Ya que Noe estará allí para esas fechas (es casi a finales de julio) y no podrá venir a Montmeló, he decidido guardar dinerillo e irme a verlas con ella. A ver si tengo suerte y consigo pases, por aquello de ahorrar...
- Escribir más... Retomar "La historia de María" allí donde la dejé; volver a escuchar esa especie de vocecillas que me iban dando las indicaciones para seguir el hilo de las cosas; encontrar una frase, donde sea, que me haga buscar un boli y cualquier trozo de papel para no olvidarla; poner palabras en un papel y que tengan sentido, que hagan sentir... aunque no me conozcan.
Creo que no me dejo nada... pero seguro que alguna cosa se me olvida. Es muy tarde, estoy viendo la entrega de los premios Gaudí con un ojillo y con el otro voy controlando lo que escribo. Acabaré vizca y es lo que me faltaba! Estas listas nunca están cerradas del todo, no son listas electorales; siempre puedo añadir propósitos nuevos, no? Por hoy ya vale. Después de tanto dar noticias de motos, me parece que se me ha ido la olla con cosas mías...
Mjo
P.S. Dos despedidas tristes. Esta tarde me he enterado de que ha muerto Paquito, un vecino de Adrall, que vivía justo enfrente de casa de mis abuelos. No era mayor, el año pasado le diagnosticaron un cáncer de colón del que le operaron la semana pasada; por lo que nos han contado, en el hospital contrajo una infección que le provocó un infarto del que no pudo ser reanimado. Será extraño volver a Adrall y no verlo; a veces parece que sólo nosotros cumplimos años y nos hacemos mayores. La gente de nuestro alrededor, en un momento de nuestras vidas, parecen hacer un pacto misterioso que les mantiene a salvo del paso del tiempo y siempre las ves igual... hasta que un buen día aparece la parca y se las lleva. Le echaremos de menos, este año la calçotada de Semana Santa será muy triste... Y la segunda, es para un amigo de cuatro patas. Se llamaba Sai y, si no me equivoco porque esto de las razas de perros no es lo mío, era el precioso perro labrador de Anna y Xavi. No sé qué le pasó, ni siquiera sabía que estuviera enfermo, pero Anna me escribió la semana pasada para decirme que había muerto. Da igual que fuera un perro, los animales suelen llenar un espacio de nuestras vidas y muchas veces no somos conscientes hasta que ya es demasiado tarde. Por suerte, Sai supo que era importante para sus dueños desde el primer momento y les devolvió el cariño en la misma medida si no más. Eso es lo verdaderamente importante.
