LA VIDA NO SE MIDE POR LAS VECES QUE RESPIRAS, SINO POR AQUELLOS MOMENTOS QUE TE DEJAN SIN ALIENTO.

PIERDE EL MIEDO, DA UN PASO ADELANTE...

lunes, 19 de noviembre de 2007

LUNES, 19-11-2007 (Lunes, lunes, lunes...)


Empieza una nueva semana y ya no sé qué hacer para dejar de pensar. Hay que ver con qué facilidad me pongo a darle vueltas a una actitud que, probablemente, no tiene nada que ver conmigo, pero confieso avergonzada que mi espíritu pesimista tiene el mando de mis sentimientos en estos días. Vaya por delante que se me adelantó la regla (por una vez!) y mi cuerpo anda preguntándose todavía qué puñetas me pasa... Si alguien encuentra la respuesta a esa pregunta, agradeceré me lo haga saber por si me es de alguna ayuda.
Dani está hoy extraño; después de despedirnos el viernes con un "ya te contaré cómo ha ido" el fin de semana de enduro que tenían programado, hoy apenas si me ha dirigido la palabra y cuando lo ha hecho, su tono era más frío que las temperaturas de estos últimos cuatro días. No es que yo sea una castañuela hoy, no me encuentro bien y eso me hace no tener demasiadas ganas de andar buscándole conversaciones, pero no sé. He tenido la impresión de que con los demás se comporta como siempre, que sólo cambia su forma de hablar cuando se dirige a mí y eso me pone de los nervios, además de hacerme darle vueltas al asunto y deprimirme un poco. No pierdo de vista que es un niño grande, recordad que tiene 27 años, pero me dan ganas de agarrarle por el cuello del jersey y decirle que me está volviendo loca y que ya no quiero más de eso. Bastante me "torturo"yo como para que él vaya añadiendo leña a mi propia hoguera.
Empiezo a pensar que estoy me está dando últimamente más dolores de cabeza de momentos de felicidad y me pregunto si ésta será la primera señal de que debo abandonar y empezar de cero. Puede un corazón olvidar en un instante? Cuánto dura la pena? Hasta qué punto puedo decir que le quise y se acabó? Ha sido cierto en algún momento o fue sólo una hermosa fantasía? De devolverme las ganas de vivir estoy pasando a no tener ganas de hacer nada.
Lo que más me fastidia es que sé, estoy segura porque ya me ha pasado, que esta tarde o mañana él volverá a ser el que era y yo volveré a estar donde estaba: justo en el limbo entre las ganas de abandonarlo todo y el deseo de quedarme por si acaso...
Bah, no hago más que divagar. Lo dejo. Dejo el blog, digo, por el momento. Besitos!
Mjo

No hay comentarios: